domingo, 29 de julio de 2018

Mortero de Cemento Fresco y Endurecido



El mortero  de cemento es un compuesto que consiste en una mezcla de aglutinante como agua, arena, cemento, piedras y otros componentes en proporciones que aseguren la manejabilidad y resistencia de la mezcla antes de su endurecimiento. Permite pegar elementos como ladrillos, piedras,  bloques de hormigón entre otros, además de ayudar a rellenar los espacios que quedan entre estos para el revestimiento de paredes.
Generalmente se usan en obras de albañilería, revestimiento de paredes, como material de agarre, entre otros. Cabe destacar que los morteros ásperos son aquellos que contienen una mínima calidad de cemento, por lo que tienen menos adherencia y son muy difíciles de manipular, mientras que los morteros con gran cantidad de cemento se retraen, tienen fisuras y poseen un mayor coste.
La manejo de los morteros ásperos se puede corregir añadiendo aditivos plastificantes. También pueden servirse de ayuda de conglomerantes como la cal, la dosificación del mortero.

 

¿Dónde se aplica el mortero de cemento?


Puede utilizarse en la construcción de paredes, para mantener unidos varios materiales de construcción. De hecho, la función principal de la capa de mortero, no es pegar ladrillos o piedras, sino que se trata más de repartir la carga de las partes entre sí, sobre todo en secciones horizontales, compensando la rugosidad de los bloques y en particular las de piedra irregular.

Propiedades del mortero fresco:


  1. Fresco: la retención de agua está íntimamente relacionada con la superficie, con el conglomerante y en general con la viscosidad de la pasta. Un mortero posee la característica de conservar el agua precisa para hidratar la superficie de las partículas del conglomerante agregado y las burbujas de aire.
  2. Endurecido:

       Resistencia mecánica: en la mayoría de sus aplicaciones actúa como un elemento de unión resistente.
        Adherencia: es decir la tracción de la unión entre un mortero y un soporte definido. Es una de las propiedades fundamentales pues determina la unión solidaria entre las piezas o partes unidas, además de influir en la resistencia de todo el conjunto.
       Retracción: esta es provocada por la perdida de agua sobrante tras la hidratación del mortero. Se ha demostrado que retracciones son más elevadas cuando el cemento es más rico y sus elementos son más finos. Esta aumenta con mayor cantidad de agua.
       Densidad: dependerá fundamentalmente de la densidad que posean sus componentes y de la relación del agua y el cemento del mortero, mientras más aumenta dicha relación mas poroso se vuelve este. Un mortero se considera ligero cuando su densidad ronda los 1300 kg.
       Permeabilidad: el paso del vapor a través de la estructura del mortero favorece la transpiración del mismo impidiendo las condensaciones en su interior.
       Retracción: cuando este no es capaz de pasar o aguantar las tensiones que produce la evaporación del agua.
       Retracción de secado: esta se produce luego de terminar el fraguado, si esta es intensa genera un cambio volumétrico que tiene la capacidad de causar tensiones en zonas que no pueden deformarse.
       Retracción térmica: se experimenta debido a la variación en la temperatura de la mezcla en el proceso de endurecimiento.
       Comportamiento térmico: se da por la conductividad del calor en el material del mortero, esta depende de la densidad, el contenido de humedad, la porosidad entre otras características del mortero. Estos parámetros dependen mucho de los componentes y medidas que contenga siendo fundamental la densidad final de la mezcla.
       Comportamiento ante el fuego: un mortero sometido a las altas temperaturas desarrolladas en un incendio, sufre una serie de cambios que afectan a su resistencia mecánica. En general, a temperaturas superiores a 250ºC las propiedades del mortero pueden sufrir una caída irreversible, tanto que incluso su color se ve afectado.


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